Pintar esferas era un trabajo magnifico. Nunca era dificil y estaba muy bien pagado. Demasiadas ganaban mas que las padres. Conseguian unos 20 dolares semanales, un buen sueldo. «Las mas rapidas podrian obtener inclusive el duplo. Podria conseguir el equivalente a unos 40.000 dolares al ano», cuenta Kate Moore.
Colorear esferas era un trabajo muy bien pagado. Las chicas ganaban muy mas dinero que las padres
Utilizaban pinceles de pelo de camello bastante finos. Para afinarlos las chupaban. Mismamente era la actividad, ‘chupa, moja, pinta’… y no ha transpirado dorso a comendar. El radio se les colaba entre los dientes, igual que la arena.
Los miembros masculinos que trabajaban en el laboratorio, sin embargo, utilizaban un equipo sobre proteccion. delantales forrados sobre plomo desplazandolo hacia el pelo unas pinzamientos sobre marfil para manejar el radio, un material que es mas activo que el uranio. Cuando las chicas empezaron a sentir que les salian extranos eczemas en la tez o que les dolia la mandibula, sus jefes las tranquilizaban diciendoles que manejaban cantidades insignificantes, que aquello era inocuo, que nunca fueran exageradas…
Nunca prestaron atencion -cuenta Kate Moore- a las advertencias sobre Thomas Edison , quien alerto sobre que «el radio puede producir un resultado irreversible. Todo el mundo los que lo manipulan deberian coger precauciones».
Katherine Donohue -madre sobre 2 ninos-, que acudio a deponer ayudada por su marido.